Cuando eres padre o madre y llegan los meses más calurosos surge uno de los temores más comunes del verano: ¿cómo evitar que el cochecito de bebé dé calor? Y es que, por muchos accesorios que tenga nuestro carrito, siempre queda la duda de si estamos protegiendo correctamente a nuestros hijos e hijas. Por eso, hoy queremos darte algunos consejos para mantener fresco el cochecito de tu bebé y protegerlo del intenso calor.
¿Cómo proteger al bebé del calor del cochecito?
1. Elige el cochecito adecuado
El primer paso para prevenir un golpe de calor repentino es elegir el cochecito adecuado. Algunos cochecitos, como el Jané Crosslight o el Jané Epic, están diseñados específicamente para soportar todo tipo de condiciones climáticas. Estos modelos cuentan con telas y tapizados transpirables y capotas extensibles que ofrecen una mayor protección contra el sol. Optar por un cochecito que tenga un color claro también puede ser una buena opción, ya que los colores oscuros absorben más calor.
2. Utiliza la capota
Uno de los errores más comunes que cometen padres y madres es cubrir el cochecito con una manta o toalla para proteger al bebé del sol. Aunque la intención es buena, esta práctica puede ser peligrosa. ¿Por qué? Porque de esta manera se dificulta el flujo del aire, con el consiguiente aumento de la temperatura dentro del cochecito creando un efecto invernadero. En su lugar, es mejor utilizar una sombrilla o una capota. De hecho, muchos cochecitos incluyen una capota ajustable que se puede colocar en diferentes posiciones para proteger al bebé del sol.
3. Opta por tejidos transpirables
Los materiales de fabricación del cochecito también juegan un papel crucial en la regulación de la temperatura. Si bien los cochecitos modernos suelen estar hechos de materiales técnicos que ofrecen cierta transpirabilidad, siempre es una buena idea verificar las especificaciones del producto antes de la compra. Asimismo, es recomendable utilizar fundas de cochecito hechas de materiales transpirables como algodón o lino. Estos materiales absorben el sudor, manteniendo al bebé más fresco. A su vez, evita materiales sintéticos, ya que son muy calurosos.
4. Mantén hidratado a tu bebé
Independientemente de las características de tu cochecito, no podemos olvidarnos de lo importante que es la hidratación en días calurosos. Especialmente para personas vulnerables y bebés. Por este motivo, intenta darle agua (si el bebé tiene la edad adecuada para beberla) y leche materna a menudo. También es buena idea llevar un rociador de agua para refrescarlo durante los paseos. En cuanto a la alimentación, si el bebé ya ha comenzado a tomar sólidos, la mejor opción son las comidas ligeras y frescas. Las frutas y verduras ricas en agua, como la sandía, el pepino y las fresas, son sólo algunos ejemplos.
5. Planifica tus paseos
Para evitar exponer al bebé a las horas más calurosas del día, es aconsejable planificar las salidas a primera hora de la mañana o al final de la tarde, cuando las temperaturas suelen ser más suaves. Si no hay más remedio y tienes que salir con tu bebé durante el día, intenta buscar rutas con sombra.
6. Utiliza accesorios que protejan del sol
En el mercado existen accesorios diseñados para mantener el cochecito fresco. Un ejemplo son las sombrillas. Entre sus ventajas podemos destacar que se pueden colocar de una manera sencilla en el carrito y que están diseñadas específicamente para adaptarse a la estructura de los cochecitos de bebé, proporcionando sombra y protección contra los rayos ultravioleta (UV) del sol. Además, están hechas de materiales ligeros y frescos con el fin de evitar que aumente la temperatura en el interior del cochecito.
7. Presta atención a tu bebé
Por último, presta atención a tu bebé durante todo el paseo. Estate pendiente de cualquier señal repentina como piel enrojecida, sudor excesivo, irritabilidad o somnolencia inusual. Si notas alguno de estos signos, coge a tu bebé de inmediato, dale líquidos y refréscalo con un paño húmedo o utilizando un rociador de agua. En casos más graves, no dudes en acudir de inmediato a un centro sanitario para que lo atiendan de urgencia. También es recomendable vestir al bebé con ropa ligera y de colores claros para minimizar el calor. Las prendas de algodón son la mejor opción, ya que permiten que la piel respire y ayudan a absorber el sudor.
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