¿Quién de nosotros tiene el tiempo extra para pensar y recordar algo como el mantenimiento de un carrito? Sabemos que no es fácil, pero limpiar el carrito de tu bebé de forma habitual ayudará a incrementar su vida útil. Hoy responderemos a las preguntas ¿cómo limpiar un carrito de bebé? ¿Qué no hacer? ¿Por dónde empezar? ¿Qué hay que comprobar? Aquí tienes algunos de nuestros consejos, sugerencias y trucos para ayudarte con el mantenimiento y la limpieza del carrito.
Limpiar las ruedas de un carrito de bebé
Empezaré por las ruedas porque son las que más atención necesitan. Es bastante frecuente el traqueteo, balance y las ruedas que giran locamente. Es molesto, a veces incluso vergonzoso, ir por la calle haciendo un ruido que se oye incluso a una manzana de distancia. Mantenerlas lo mejor posible evitará esto
Lo primero que hay que hacer regularmente es limpiar y lubricar las ruedas. Saca cada rueda, comprueba si hay suciedad, pelos y otros trozos visibles que puedan ralentizar tu rueda o empeorar su giro. Lo recomendable es limpiar la rueda, dejarla secar y luego lubricar.
Una vez tengamos el eje de la rueda limpio, debe ser engrasado por pulverización o cualquier otra aplicación que encontrarás en las gasolineras o en las tiendas de accesorios para coches.
Limpiar las el chasis de un carrito de bebé
No solo debes limitarte a lubricar las ruedas a lo largo de los años. Las juntas de plástico y metal se deterioran, y sí, pueden empezar a atascarse y ser ruidosas a causa de la suciedad y la fricción causada por los materiales de ajuste. Así que, aunque sea con menos frecuencia que las ruedas, limpia las juntas y todas las piezas móviles, así como los alrededores del freno, con un paño o incluso con un pequeño cepillo. Luego lubrica para que no se atasque el freno o el mecanismo de plegado. Lubrica con cuidado, despacio, no demasiado. Ten cuidado de que los tejidos y las telas no se engrasen. Puedes cubrir o quitar las telas si es posible. También hay que tener en cuenta los espacios relacionados con las piezas de plástico.
Limpiar los tejidos de un carrito de bebé
Existen algunas marcas de carritos que facilitan la retirada de las fundas de tela de todo el carrito y simplemente tienes que meterlas en la lavadora. Sin embargo, esto no es lo común. Aunque a veces se pueden quitar todas, en la mayoría de los casos no deben lavarse a máquina. Si compruebas las etiquetas, hay muchas posibilidades de que las partes textiles no se puedan lavar a máquina.
Además, como son más rígidos que una camiseta, por ejemplo, podrían rasgarse o tener agujeros después de un lavado y no merece la pena el riesgo.
La mayoría de las telas de los carritos están hechas para que sean bastante fáciles de limpiar, con un paño húmedo o un cepillo . Y si realmente tienes que lavar las fundas a máquina, primero limpialas con la aspiradora y luego utiliza el programa más suave que ofrezca tu lavadora.
Cuanto más alta sea la temperatura, así como la velocidad de centrifugado, mayor será el daño, decoloración o debilitamiento de los tejidos del carrito.
Reparación de carritos de bebé
Pese a que todos estos consejos son útiles y alargan la vida de tu carrito, siempre existe la posibilidad de que alguna pieza se dañe o requiera ser cambiada. En estos casos no hay que alarmarse ya que existen empresas que se dedican a la venta de recambios para carritos de bebé.
En Recambios Jané no solo vendemos piezas, sino que también ofrecemos servicios de reparación y mantenimiento de carritos de bebé.