Carritos de bebéPartes de un carrito de bebé: bolsa, silla y capazo

¿Faltan meses para la llegada de vuestro bebé y todavía no os habéis decidido sobre qué cochecito comprar? No desesperéis. Es normal perderse entre las distintas opciones del mercado, especialmente si sois primerizos o primerizas. Como sabemos lo complicado que puede llegar a ser tomar una decisión definitiva, hoy os queremos explicar cuáles son las partes de un carrito de bebé y qué debéis tener en cuenta a la hora de decantarse por un modelo u otro. ¡Tomad nota!

¿Cuáles son las partes de una silla de paseo?

1. Chasis o estructura

Podríamos definir el chasis como el esqueleto del carrito de bebé. Esta parte es fundamental ya que sostiene todo el peso del niño y los accesorios del carrito. Generalmente, los chasis están fabricados de materiales ligeros pero resistentes, como el aluminio o el acero. La ligereza del chasis es crucial para mover el carrito con agilidad, mientras que la resistencia asegura que el carrito sea duradero y seguro. Además, muchos chasis están diseñados para plegarse, lo que facilita el almacenamiento y transporte del carrito cuando no está en uso. Estos sistemas de plegado varían según el modelo. Incluso algunos permiten que el carrito se pliegue con una sola mano.

2. Asiento o capazo

Existen dos tipos de asiento: el asiento tipo capazo y el asiento reclinable. El capazo es una opción ideal para los recién nacidos, ya que permite que el bebé se recueste completamente. Esto es muy útil durante los primeros meses de vida, cuando el bebé aún no puede sostener su cabeza por sí mismo. Por otro lado, los asientos reclinables permiten ajustar la posición de reclinación. ¿Sabíais que algunos modelos se pueden inclinar completamente? Otra característica común de los asientos es que suelen estar acolchados para garantizar el confort del niño y, a menudo, cuentan con fundas extraíbles y lavables para facilitar su limpieza.

3. Capota o toldo

La capota o toldo es una de las principales partes de un carrito de bebé, ya que protege al niño o a la niña ante elementos climáticos como el sol, la lluvia o el viento. Muchas capotas, como las de los modelos Jané Muum,  están hechas de materiales resistentes a los rayos UV, lo que ofrece una capa de protección adicional. En algunos modelos la capota es ajustable y extensible para cubrir al bebé según el momento del día. Otras cuentan con ventanas de malla que favorecen la ventilación, evitando los temidos sofocos del bebé. Otra ventaja es que estas ventanas permiten a los padres vigilar al bebé mientras empujan el carrito.

4. Ruedas

Los carritos pueden tener diferentes configuraciones de ruedas, con variaciones en tamaño y tipo. Por ejemplo, el modelo Jané Trider cuenta con ruedas delanteras giratorias, lo que facilita el cambio de dirección y la toma de curvas. Estas ruedas tienen un mecanismo de bloqueo que permite fijarlas cuando se necesite un poco más de estabilidad en superficies irregulares.

Por otro lado, las ruedas traseras tienden a ser más grandes y robustas. Por tanto, aportan una mayor estabilidad. Muchas ruedas traseras están equipadas con sistemas de suspensión, que absorben los impactos de terrenos irregulares.

5. Frenos

Cuando hablamos de seguridad no podemos pasar por alto los frenos del carrito. La mayoría de los cochecitos modernos tienen un sistema de frenos que se acciona con el pie. Este freno se aplica generalmente a las ruedas traseras y es imprescindible para detener el carrito de manera segura. Algunos modelos también cuentan con frenos en las ruedas delanteras para un mayor control en todo tipo de terrenos. Es importante recordar que los frenos deben ser fáciles de accionar, pero también tienen que estar diseñados para no activarse de manera accidental mientras se empuja el carrito.

6. Manillar

El manillar puede variar en diseño dependiendo del modelo del cochecito. Algunos carritos cuentan con manillares ajustables en altura para adaptarse a cada padre o madre. Otros están diseñados con manillares ergonómicos con fundas, una opción perfecta para los paseos más largos.

7. Sistema de arnés o cinturones de seguridad

El sistema de arnés y cinturones de seguridad es fundamental para la seguridad del bebé dentro del carrito. Generalmente se trata de un arnés de cinco puntos que sujeta al bebé de los hombros, la cintura y entre las piernas. Este tipo de arnés evita que el niño o la niña se deslice fuera del asiento o que se levante accidentalmente mientras el carrito está en movimiento. Estos arneses suelen ser acolchados para evitar molestias al bebé. ¡Ah! y son ajustables, lo que permite adaptarlos a medida que va creciendo.

8. Cesta inferior y accesorios

La cesta inferior es uno de los accesorios más prácticos en un cochecito de bebé. ¿Su ventaja? Que permite llevar bolsas, juguetes o cualquier otro complemento para el paseo sin la necesidad de ocupar mucho espacio, ya que va colocada en la parte inferior del carro. Además de la cesta, muchos carritos incluyen accesorios adicionales como portavasos, bandejas, mosquiteras, cubiertas para la lluvia, entre otros. Estos extras aumentan la comodidad y la practicidad del carrito, adaptándose a las necesidades específicas de cada familia.

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